En Roa, corazón de la Ribera del Duero disponemos de una finca de 4,8Ha. Esta parcela esta tratada con principios biodinámicos y las fases lunares cobran gran importancia en el calendario de las tareas que se requieren en cada momento. Cuidamos al detalle cada trabajo que realizamos, desde el despabilado manual hasta que el vino duerme en barrica, paso a paso, punto por punto, sabemos lo que hay que hacer y lo hacemos de manera excelente: Pequeñas producciones de uva seleccionada de la máxima calidad procedentes de cepas casi centenarias en las que trabajamos para conseguir rendimientos muy bajos. Selección y despabilado manual, fermentaciones espontaneas para lograr la máxima expresión del terroir, mínima intervención y mínimas adiciones de sulfitos, battonage en barrica y malolactica en barrica. Y sobre todo realizamos un exhaustivo cuidado sobre el terroir. Al fin y al cabo, tratamos de hacer vinos de alta calidad potentes, sofisticados y complejos, apreciados por los consumidores finales y elogiados por los sumilleres profesionales.