VIÑEDOS Y BODEGAS
Cepas viejas, tierras únicas y maestros bodegueros
Después de varias generaciones dedicadas al cultivo de la vid, la actual generación tomamos la decisión de convertirnos en vinicultores. Para ello, alcanzamos un acuerdo con la familia propietaria de una bodega vecina que nos permitió utilizar sus instalaciones para elaborar las primeras botellas.
Alentados por la respuesta del sector, pero limitados por los mismos condicionantes que toda bodega, nos aventuramos a la búsqueda de otras variedades, suelos y climatologías que, junto a un equipo de profesionales, nos permitirían elaborar el resto de vinos especiales que imaginábamos.
MONTSANT
Garnacha Tinta, Blanca y Peluda
En la finca Les Rotes, en Els Guiamets, encontramos 2,6 ha de viñas conducidas en vaso plantadas en los años 1950. A 300 metros sobre el nivel del mar y protegido de la brisa marina por las montañas, el terreno es calcáreo, con arcillas, dolomitas y nódulos formados por yeso, arenas y sílex. La orientación sureste y el microclima influenciado por el río Ebro con temperaturas de contraste elevan los polifenoles, produciendo vinos afrutados y aromáticos. La bodega ocupa los bajos de una casa familiar donde elaboramos con métodos tradicionales vinos de larga guarda en barricas de acacia, cerezo o castaño.
RIBERA DEL DUERO
Tempranillo
En Roa encontramos la finca El Cardenal, con una superficie de 5,3 ha a 800 metros sobre el nivel del mar. Es una parcela de cepas con muy baja productividad y más de 65 años de la variedad Tempranillo conducida en espaldera. El clima es mediterráneo con carácter continental y acusadas oscilaciones térmicas a lo largo de las estaciones que producen un hollejo fuerte. El suelo cuenta con sedimentos calizos, tierras arcillosas y zonas pedregosas en las partes altas, que aportan al vino complejidad y estructura. La crianza se produce en barricas de roble francés y americano con un tostado medio controlado por el enólogo.